Geografía e Historia de los Niños de la Guerra

 

Refugiado político

López Sanmartín, Josefina

  • Barcelona, 21 de febrero de 1919 – Grao de Castellón, 6 de enero de 1989.
  • Llegada a Orán ?
  • Estancia en Orán en un campo
  • Dirección de  las JSU (Juventudes Socialistas Unificadas)
  • Trabajó en Radio España Independiente
  • Repatriación en 1969
Lista Josefina López

Pilar Aragón, locutora de la mujer española

Josefina López Sanmartín, Barcelona 1919. Tenía sólo 13 años cuando en 1932 se afilió al Partido Comunista, y formó parte de la dirección de las Juventudes Socialistas Unificadas desde 1936 hasta 1945. Fue precisamente en un congreso anual de las JSU donde conoció Fernando Claudín, el destacado dirigente comunista que se convertiría en su marido. Antes de cumplir los dieciocho años ya había participado en campañas electorales pidiendo el voto de las mujeres porque, pese a su juventud, era una oradora enérgica y extraordinariamente elocuente, con una formación alimentada por su entusiasmo por la lectura de libros y revistas. Terminada la guerra, Josefina López se marchó al exilio con Fernando Claudín, estando embarazada de este .En Orán (Argelia) fueron confinados en dos campos de concentración distintos.

Sus pasos por la Unión Soviética nos los cuenta Luis Zaragoza Fernández en su libro “Radio Pirenaica. La voz de la esperanza antifranquista”:

Claudín viajó a América a trabajar para el Partido, mientras Josefina, con una niña de unos meses, fue enviada a recibir formación teórica a la llamada Escuela Leninista (el centro de formación política de la Komintern) situada en la localidad de Plániernaya, a 15 kilómetros de Moscú. “Los dos, cada uno por su lado, insistían en que los reunieran, pero el Partido se mostró inflexible: la disciplina es la disciplina, y si el Partido te pide que te tires por un despeñadero, pues te tiras”, recordó en sus memorias Carmen Parga, compañera de Josefina en Plániernaya. Su hija moriría poco después, víctima de una de las epidemias que al parecer eran corrientes en las casas de niños en las que se educaban los hijos de los cuadros del Partido. En el exilio, Claudín y Josefina reharían sus vidas con diferentes parejas.

Cuando las tropas nazis estaban a punto de entrar en Moscú, fue evacuada a Siberia con otros exiliados españoles, a fin de evitar que los nazis los hicieran prisioneros y los devolvieran a España. En 1943 regresó a Moscú, donde se licenció en Eslavística y terminó su tesis doctoral sobre las relaciones hispano-rusas durante la época napoleónica. En agosto de ese año se  incorporó a Radio España Independiente.

Luis Zaragoza continúa contando en su libro sobre La Pirenaica:

Era «una chica alegre, con mucho encanto y gracia», «combativa y ágil», aunque algo débil de salud. Realizó las más variadas tareas durante los veinticinco años que estuvo en la emisora: desde responsable del archivo hasta redactora y locutora:

«Como redactora de la emisora llevaba distintos aspectos, aquellos que surgían, puesto que éramos muy pocos, así que tocaba hacer de todo: desde el suelto más sencillo hasta un comentario político sobre cualquier tema o un editorial. Luego era la responsable de la emisión “Página de la mujer”, que se emitía todos los miércoles, que llegó a tener una gran audiencia femenina, y en la cual yo era la comentarista Pilar Aragón. Pilar, porque siempre en la clandestinidad me llamaron Pilar. Y Aragón porque es la tierra de mi madre y en la que transcurrió mi infancia» (Josefina López en entrevista con José Fernández-Cormenzana)

Se volvió a casar con Joaquín de Diego del Buenconsejo (1912), un dependiente de comercio afiliado al PCE desde 1936. Durante la Guerra Civil fue responsable de las JSU de batallón y de la 42 Brigada Mixta. También fue miembro de la “Comisión Nacional de Educación del Soldado” (denominación oficial del organismo de la JSU encargado del trabajo en las fuerzas armadas). En la URSS trabajó en Járkov,  en la fábrica Lijachov, fue voluntario en Ejército Rojo y después obrero en la fábrica N.30 de Moscú. También trabajó en el Ministerio de Reservas de Trabajo y fue funcionario del Partido.  Concretamente era considerado la mano derecha de Claudín. Aprovechando este hecho, el general  de brigada de la Guardia Civil e historiador, Francisco Aguado Sánchez, escribiría en  un artículo titulado “En torno al bandolerismo comunista” de 1972, refiriéndose a Claudin,  lo siguiente: “Por su labor nefasta con los exiliados, se ganó la enemistad de todos. Su secretario Joaquín de Diego, se amancebó con su mujer“. El articulo pretendía denunciar “como se impulsó una lucha soterrada en contra de la España auténtica, nacida el 18 de julio de 1936, desde el otro lado de la frontera pirenaica.

Por su parte, Gregorio Morán escribiría en su libro “Miseria y grandeza del partido comunista de España”:

Tanto Claudín como su segundo, Joaquín de Diego, estaban obsesionados por la pureza ideológica, hasta tal punto que cualquier palabra banal podía ser interpretada como blasfemia que merecía el máximo castigo. Ninguno de los residentes en Moscú podrá olvidar la escena de Adriano Iglesias vomitando en una reunión —calle Gorki, número 10— presidida por Claudín y De Diego en la que Iglesias no pudo soportar las cosas y las amenazas que le echaron encima. Todo porque mientras iba hacia la fábrica charlando con Julio Mateo y otro militante se le ocurrió comentar… “dicen que Franco era valiente en las batallas”. Un joven alicantino al que la guerra cogió estudiando, haciendo cursos de piloto en la URSS, Juan Riera Trujillo, se suicidó ante la imposibilidad de poder entregarles a De Diego y a Claudín los requeridos antecedentes biográficos que por su edad no tenía. El doblemente condecorado piloto José María Bravo estuvo a punto de ser enviado a campos porque, según De Diego, había ocultado un dato fundamental de su biografía: que estudió en la Alemania nazi. Fueron necesarios grandes esfuerzos para explicarle que antes de 1933 se trataba de la República de Weimar. Joaquín de Diego auténtico martillo inquisitorial era un modesto dependiente de comercio en Madrid que gozaba del sarcasmo de tener de segundo apellido el de “Buen Consejo”. Pero su personalidad por zafia y brutal que fuera no puede explicar por sí sola el envío de hombres como Tuñón a Magadán, el nombre más terrorífico de los campos siberianos, o la denuncia contra Carmen Juan que sufría el doble castigo de marchar a trabajos forzados mientras metían a su hija en un orfanato.

Joaquín de Diego murió en Moscú en agosto de 1957.

Luis Zaragoza continua contando el periplo de Josefina López en la Pirenaica:

La última de las secciones que siempre permanecieron en antena fue la dedicada a la mujer. En 1964, Mendezona describió así sus objetivos: «La hacen casi exclusivamente las oyentes. Esto explica que pueda ocuparse con detalle de problemas de la vida diaria en los pueblos y ciudades. Se aborda la cuestión de la carestía, los salarios insuficientes del marido, de los hijos. Las cuestiones de la vivienda, la escuela, la enseñanza y la infancia en general. Cuestiones de derechos económicos, políticos, sociales, jurídicos, de la mujer. (…) Explica a las mujeres por qué deben unirse a la batalla contra la dictadura del general Franco, a la lucha por la libertad y la democracia en España»

En los comienzos de La Pirenaica se ocuparon de esta emisión Irene Falcón y la misma «Pasionaria». Pero quien la llevó a su máxima popularidad fue Josefina López («Pilar Aragón»), la primera locutora de REI, en espacios como «Charlas femeninas» o «Página de la mujer». Josefina utilizaba un tono que algunos de sus compañeros consideraban demasiado sentimental, demasiado sensiblero, pero que sin duda supo conectar con buena parte de su público potencial hasta el punto de que, después de Ramón Mendezona, fue la locutora más popular y apreciada por los oyentes.

Josefina, metida de lleno en lo que se denominó la crisis Hernández-Castro, ecribiría:

«Yo que he tenido la suerte de llegar a la Unión Soviética y trabajar junto a la dirección del Partido tengo que decir que soy una de las comunistas que en la Unión Soviética se ha deformado desde el punto de vista que he perdido la combatividad y la agilidad política. Durante un período determinado a mí me ha parecido mucho más cómodo dedicarme a estudiar Historia. (…) Resulta que yo me he enfrascado con los Babilonios como don Quijote con su libro de Caballerías. (…) Muchas horas he quitado al trabajo del Partido. (…) Cuando vino Carrillo se nos dio una denominación clavada: los siete sabios de Rostoquino (…), obreros intelectualizados y campesinos leídos. (…) A mí me salvó la fe en Dolores, que en cuanto tocaban a la camarada Dolores decía: Vosotros sois de la acera de enfrente, pero no nuestros. (…) Esa fidelidad me privó de que Castro con sus intrigas me hiciera caer, me privó de que no hubiera reaccionado a tiempo, cuando me enteré de la monstruosidad de aquel complot. (…) He cometido el delito de creer en Uribes hasta el final (…), ha sido un delito del que me acuso ante el Partido. (…) Yo no quiero echar la culpa a los demás, también tengo mi culpa» (Manuel VÁZQUEZ MONTALBÁN -1995-, págs. 58-59 y 150)

En enero de 1955, Radio España Independiente (y con ella Josefina López) se trasladó a Bucarest. Apenas dos meses después comenzó a transmitir el servicio en español de Radio Rumania Internacional. A él se incorporó el nuevo compañero de Josefina, Antonio Gálvez. Desde 1961, se encargó también del «Correo de La Pirenaica», un espacio en el que se daba acuse de recibo a las cartas que enviaban los oyentes a Radio España Independiente. Se doctoró en la Facultad de Historia de Bucarest con un trabajo sobre las relaciones comerciales entre España y Rumania en el siglo XIX y comienzos del XX.

Antonio Gálvez Fenoll  (11/8/1914, Orihuela,Alicante – 13/5/1981, Castellón de la Plana) Esta es su biografía en la Fundación Pablo Iglesias:

Ingeniero agrónomo. Afiliado a la JS de Orihuela (Alicante) siendo secretario de la JS Unificadas representando a ésta en el Frente Popular, la Junta Calificadora de Expropiación de Fincas Rústicas y el Comité de Orden Público de Orihuela. Finalizada la guerra civil se exilió en Checoslovaquia donde trabajó como periodista en la Federación Internacional de la Juventud y en las emisiones en castellano de Radio Praga. Posteriormente marchó a Rumanía trabajando en el Instituto Central de Investigaciones Hortofrutícolas de Bucarest y colaborando con Radio España Independiente “La Pirenaica” y en los programas en español de la emisora estatal rumana. Participó en sesiones del COMECON (Consejo de Ayuda Mutua Económica, organismo de colaboración económica de los países del Este). Regresó a España en los años setenta residiendo inicialmente en Barcelona y trabajando como director del campo de experimentación sobre invernaderos del grupo Laminaciones Lesaca S. A. así como de profesor en las Escuelas de Capacitación Agraria de las Islas Canarias. Finalmente se estableció en Castellón donde falleció el 13 de mayo de 1981.

El 23 de noviembre de 1964 ocurrió uno de los sucesos mas graves que se produjeron en todos los años de existencia de la Pirenaica: La agresión física de Roberto Carrillo (hermano de Santiago Carrillo) a Josefina López. Roberto Carrillo Solares había ingresado en el PCE en Argelia, en el año 1943. Desde 1951 al 53 fue representante de las JSU, de las que su hermano Santiago era entonces Secretario Gerneral en la Federación mundial de la juventud. En 1954 estuvo en China. Viajó por muchos paises de Centroamérica y, especialmente, a Bélgica. Se casó con la rusa Tamara Karpunenko (Chita, 1938), secretaria de la Cátedra en el Instituto de relaciones Internacionales de Moscú. Tuvieron una hija: Natalalia Carrillo, nacida en Moscú.

Nos cuenta Luis Zaragoza:

Desde luego, el hermano del secretario general del Partido no tenía el temperamento más adecuado para convivir en unas condiciones como aquéllas. Durante su estancia en la emisora dio repetidas muestras de lo que sus compañeros calificaron de soberbia, intolerancia y sectarismo. Además, las relaciones entre él y Josefina López nunca fueron buenas. «Josefina era muy activa, muy peleona, muy entregada a su trabajo», recuerda Marcel Plans. «Roberto era un hombre enfermo, bebía mucho y por lo tanto estaba en situaciones de humor muy distintas, se sentía muy amargado, su trabajo en la redacción era muy pobre, escribía muy poco, no podía leer tampoco porque tenía los pulmones muy delicados, y Josefina, que no tenía pelos en la lengua, le hacía ver que estaba allí por enchufe y no en calidad de trabajador». En estas circunstancias, no fue extraño que un día la cosa pasase a mayores:

«Nos preguntaréis ¿cómo ha podido llegarse a este extremo de violencia, sin precedente entre nosotros? [escribió Mendezona a Santiago Carrillo]. Eso mismo nos hemos preguntado todos y, desde luego, si al producirse la discusión hubiéramos tenido la más ligera idea de que pudiera derivar a la agresión, se habría cortado en el acto. Pero cada cual estábamos en nuestro trabajo, oíamos unas voces, Roberto irrumpió en mi despacho descompuesto, diciendo unas palabras ofensivas para Josefina que no quiero repetir aquí, y tras un breve duelo verbal con ella, que venía detrás, la abofeteó. Josefina quedó en el suelo, derribada por la bofetada y presa de una crisis nerviosa. La conmoción sufrida por la perjudicada ha sido grande: hemorragia, desarreglos hepáticos y esa sensación de desequilibrio moral que queda después de estos incidentes, máxime tratándose de una mujer»

Tras días de discusiones, cartas al partido y respuestas, pasó lo que tenía que pasar. Roberto Carrillo fue apartado de la redacción (fallecería en Moscú en 1977). Josefina continuó en ella hasta 1968.

Josefina López, como hemos dicho, se fue en 1968 . Al parecer, Josefina y su marido, Antonio Gálvez, gestionaron su repatriación con ayuda de Sara Montiel, que en esos días visitó Bucarest para dar varios recitales. En España, Josefina se desvinculó del PCE y se afilió al PSOE, fue concejal y teniente de alcalde del Ayuntamiento de Castellón, en 1986 fue elegida senadora por esta provincia y desempeñó su cargo hasta que falleció el 6 de enero de 1989.

Bibliografía

  • Morán, Greogrio (1986): Miseria y Grandeza del Partido Comunista de España, 1939-1985 . Editorial Planeta
  • Zaragoza Fernández, Luis (2008): Radio Pirenaica. Editorial Marcial Pons
  • Carrión, Gabriel (2020): Fichados. Los archivos secretos del franquismo. Editorial Almuzara
  • Aguado Sanchez, Francisco (1972): En torno al bandolerismo comunista. Revista de Estudios Históricos de la Guardia Civil, nº9. Editores: Dirección General de Estadística y Centro de Estudios Históricos de la Guardia Civil
  • Fundación Pablo Iglesias
  • Archivo de Rtve. (25-1-1989): Radio Pirenaica. Aventura de una radio clandestina (II)
Josefina López Sanmartín
Fernando Claudín
Antonio Gálvez Fenoll

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