Geografía e Historia de los Niños de la Guerra

 

Maestro

Celso López Rodríguez

  • Castrillo del Condado, León, 28 de julio de 1886 – Eupatoria, Rusia, diciembre de 1954
  • Expedición de El Musel
  • Casa de Niños de Leningrado
  • Fallece en Rusia

Maestro leonés

Celso López Rodríguez, es hijo de Vicente López Prieto y Benita Rodríguez González. Nace en el pueblo leonés de Castrillo del Condado, antes llamado Castrillo de Porma, perteneciente al municipio de Vegas del Condado, situado en la margen derecha del Río Porma.

Obtiene el título de Maestro de Primera Enseñanza el 21 de marzo de 1914 y toma posesión de su primer trabajo el 28 de noviembre de ese mismo año, como maestro interino de la Escuela Nacional Mixta de Grandiella, en el concejo de Riosa, con un sueldo de 500 pesetas anuales. En ella permanece hasta el 2 de julio de 1916. El 14 de octubre de ese año toma posesión de la Escuela Nacional Mixta de San Adriano, en ese concejo, donde su sueldo se ve incrementado en 50 pesetas anuales. Cesa el 24 de junio de 1918 y, nuevamente, hace las maletas en dirección a Vegalagar, pueblo situado en el concejo de Cangas del Narcea, donde toma posesión de su nueva escuela el 15 de septiembre de 1919. En el nuevo destino permanece hasta el 1 de septiembre de 1921 con un sueldo de 1.000 pesetas anuales. Un día después toma posesión de la escuela de Araniego, localidad situada a 25 km del destino anterior y a 10 km de Cangas, capital del concejo. Aquí permanece hasta el 20 de enero de 1936. Entra con un sueldo de 2.000 pesetas y en el momento de su cese ya ganaba 3.000 pesetas anuales.

Celso López se casa con la maestra Pilar Elías Gómez y tiene una hija. La Revolución de Octubre sorprende al matrimonio en el occidente de Asturias, y aunque los episodios revolucionarios no tienen mayor relevancia en la comarca, sí se ve alterada la vida de sus gentes. La presencia de la fuerza pública, los detenidos y la derechización, poco tiempo después, de la Corporación Municipal (la corporación cesada era republicana y de izquierdas. Los nuevos responsables son gente de derechas), desembocará en una radicalización que aflorará con crudeza durante la Guerra Civil.

Celso y Pilar se ven envueltos de lleno en estos sucesos. En una denuncia de José María Álvarez, párroco de Argancinas, (pueblo del concejo de Allande situado a 13 km de Pola y a 16 km de Cangas del Narcea) presentada ante el gobernador, se acusa a Pilar, maestra de esa misma localidad, y a su marido Celso, de que “el día 18 de octubre de 1934, en la puerta de la escuela y ante los niños y alguna persona mayor, pronunciaron graves ofensas contra el gobierno, por haber enviado a sofocar la revolución a Tropas Regulares; y contra el Ejército, diciendo que este había cometido más asesinatos que los obreros, que eran los verdaderos inocentes”. De hecho no les faltaba razón: el teniente coronel Yagüe, Franco, el general López Ochoa (el “carnicero de Asturias”) o el oficial de la Guardia Civil Lisardo Doval, quien tenía viejas deudas pendientes con Asturias, se encargaron de ejercer una brutal represión contra los revolucionarios, provocando asesinatos, torturas, saqueos y violaciones. Tal fue así que en los meses siguientes se sucedieron numerosas protestas internacionales.

La denuncia añade: “En el mes de mayo del año 1932 se dió un mitin comunista en la Escuela y en cuyo acto tomaron parte dichos maestros, pronunciando conceptos disolventes.” Curiosamente el cura manifiesta que no presenció los hechos pero “lo sabe por referencias que le facilitaron los vecinos”. Varios de ellos firmaron un pliego apoyando la denuncia y lo depositaron en el buzón de correos de Pola de Allande. Ante los ruegos del maestro, prometiendo que su mujer y él se irían del pueblo si retiraban la denuncia, la recogieron del buzón con la colaboración del cartero. Como pasado el tiempo los maestros no cumplieron su promesa, reprodujeron la acusación. Finalmente solo es procesada Pilar Elías Gómez. El Consejo de Guerra ordinario se celebra el 5 de abril de 1935, a las cuatro de la tarde, en el salón de actos que se encuentra en los bajos del antiguo Instituto Jovellanos de Gijón, ante el juez Manuel Costell, bajo la acusación de supuesto delito de injurias contra el Ejército y el Gobierno. En la declaración sumarial, la procesada niega las injurias, atribuyéndolas a venganzas personales. Y en cuanto al mitin celebrado en la escuela en 1932, manifiesta que tuvo un carácter meramente cultural. La acusación en sus conclusiones definitivas afirma que: “utilizando la influencia sobre los niños, inculcaba a estos ideas disolventes desde mucho antes de la revolución. Que tal propaganda obtuvo su fruto pernicioso en aquel movimiento” y mantiene que: “profirió graves injurias contra el Gobierno y contra el Ejército”, pidiendo para la acusada la pena de 6 años de prisión correccional. Pilar, asustada y compungida durante todo el proceso, a medida que el juez iba leyendo las declaraciones acusatorias, rompe a llorar. La defensa, llevada a cabo por Morán Cifuentes, hace notar su extrañeza ante el hecho de que si la acusación fue formulada contra el matrimonio, y por los mismos sucesos, solo fuera  procesada la mujer. Termina solicitando su absolución por falta de pruebas. Retirado el Tribunal a deliberar, dicta sentencia condenando a Pilar a 8 meses de prisión correccional.

Casi tres meses después, el 29 de junio de 1935, Celso López recibe en su escuela de Araniego la visita de Teresa Rodríguez Álvarez, inspectora de Primera Enseñanza perteneciente a una familia de maestros, de la que el miembro mas conocido es su hermano Alejandro Casona. Se conserva una pequeña libreta en la que Teresa iba escribiendo unas breves anotaciones sobre el estado de las escuelas que visitaba. Sobre la escuela de Celso escribe: “29 junio. Celso López. Matricula 27, en el momento 18. (Se entiende niños matriculados y asistentes ese día al colegio) Leen bastante bien, tienen cuadernos pasables. Hay puesta exposición con los cuadernos y trabajos manuales. Procura dar a sus enseñanzas el máximo de plasticidad (mapa, encerado, dibujo, acción) y obtener para sus discípulos una expresión espontánea oral y escrita. Por lo demás su trabajo me parece concienzudo y buena su voluntad; dificulta su labor la irregularidad de la asistencia”.

Celso vuelve a cambiar de destino y el 21 de enero de 1936 toma posesión de la escuela de Limés, pueblo situado a escasos 14 km de su anterior escuela y a 4 km de Cangas del Nacea. Su sueldo continua siendo de 3.000 ptas. anuales. Allí permanecerá hasta el 18 de julio de 1936, día del golpe de estado. Todo indica que posteriormente se desplaza a Gijón donde dará clases en la Academia Covadonga. El Colegio, en el inicio de la guerra, ya había acogido a 30 niños sin familia, y en octubre de 1936 ya empieza a funcionar el orfanato Alfredo Coto en el antiguo Colegio de San Vicente Paul, a donde fueron trasladados. Cuando Celso López embarca el 23 de septiembre de 1937 acompañando a los niños asturianos a la Unión Soviética, estaba afiliado a Izquierda Republicana y a la U.G.T.

En la Unión Soviética, trabajó como maestro en la casa de niños españoles de Leningrado, siendo evacuado junto a los más pequeños a la región de Kírov. Retornó con ellos a Moscú tras la guerra, continuando como maestro en Bólshevo. Posteriormente trabajó como obrero en Crimea y no se llega a repatriar porque fallece en Eupatoria en diciembre de 1954, dos años antes de las expediciones masivas de retorno, en 1956.

Fuente:

  • Archivo Histórico de Asturias: Expedientes de Maestros. Caja Nº 184645.
  • Pérez Rodríguez, Mercedes (2004): La Revolución de Octubre de 1934 en Asturias. Su incidencia en Cangas Del Narcea. Publicado en La Maniega, nº41, en julio-agosto de 2004
  • Diario La Región. Sábado 6 de abril de 1935
  • Huerta, Antonio; Gecuna (2011). Xixón 1936-37. Un recorrido por el Xixón de la Guerra Civil. Memoria Social, Ayuntamiento de Xixón.

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